
Los rábanos son hortalizas fáciles de cultivar, maduran rápidamente y crecen en suelos más ligeros, por lo que pueden cultivarse en un lugar en el que se haya acabado de cosechar. También, existen dos grupos principales: el rábano de ensalada y el rábano chino (o daikon); éste difiere del de ensalada en que es alargado y blanco.
Además, son hortalizas de estación fría, ideales para cultivarse en primavera, otoño e invierno. Los rábanos chinos se desarrollan bien en días fríos y cortos;también pueden cultivarse en climas más cálidos, siempre que estén en un lugar sombreado o resguardado. Deben cosecharse tan pronto como estén maduros; si los deja demasiado tiempo en el suelo se vuelven leñosos.
Los rábanos pertenecen al grupo de las crucíferas como la col, la coliflor, el rábano,el colinabo y el nabo. Como ocurre con el resto de hortalizas, es importante rotar los cultivos, ya que existe una serie de plagas y enfermedades especificas de estas plantas.
Cultivo de los rábanos
Siembra Siempre de forma escalonada las semillas de mediados de primavera a principios de otoño. Reduzca la cantidad de plántulas para evitar una plantación excesiva. Siembre los rábanos de ensalada en verano y los rábanos chinos a finales de verano. |
Cosecha Ocho semanas después de sembrarlos. |
Cuidados Añada cal a los suelos ácidos y aplique un fertilizante de liberación lenta. En periodos secos riegue cada semana. |
Plagas y enfermedades Mosca de la col, escarabajo de pulga y babosa. |
Propiedades del rábano
Los rábanos, son muy buenos para nuestra salud y nuestro bienestar porque tiene un alto contenido de nutrientes como el folato (importante para la división celular, entre otras cosas), el potasio (responsable de mantener el equilibrio ácido-base) y la vitamina C. Seguro que no lo sabes, pero los rábanos son una verdadera bomba de vitamina C y, por lo tanto, muy beneficiosos para nuestro sistema inmunológico.