
Las grosellas suelen ser los frutos preferidos de pájaros; además, es necesario protegerlas para evitar que se coman toda la cosecha. Es recomendable construir una jaula para frutales (una estructura de metal o madera recubierta por los lados y por la parte superior de una rejilla tensada provista de una puerta en uno de sus lados). Existen numerosos modelos en el mercado. Otra opción es construir un cobertizo con cañas de bambú.
También, las bayas prefieren un buen acolchado de materia orgánica bien descompuesta durante el invierno o a principios de primavera.
Además, los groselleros q son arbustos longevos que prefieren suelos ricos y frescos; también, pueden cultivarse sin problemas en espacios parcialmente sombreados.
Son plantas robustas y resistentes, y además, toleran bien las podas inadecuadas; de hecho, suelen ser las últimas plantas frutales arbustivas que mueren en un jardín abandonado. Sin embargo, constituyen una apetitosa fuente de alimento para los pájaros, por lo que es necesario protegerlas con una red. Las variedades más populares son «Wilson’s Longbunch» y «Raby Castle».
Cultivo de groselleros
Plantación En otoño (en recipiente), o en invierno (ralees desnudas), en suelos fértiles, frescos y sombreados |
Cuidados Acolche bien el suelo con materia orgánica. Pulverice las plantas con una solución líquida de algas. |
Cosecha A medida que maduren los frutos. |
Poda del melocotonero A mediados de verano, después de la cosecha, y de nuevo en invierno |
Propiedades de las grosellas
Algunos de los principales beneficios que aporta un consumo habitual de esta fruta son los siguientes:
- Las grosellas tienen la facultad de contrarrestar la acción de los radicales libres por su alto contenido en vitamina A.
- Contienen flavonoides y antocianinas, unos elementos naturales de gran eficacia a la hora de mantener los vasos sanguíneos en perfecto estado, lo que es fundamental para que las venas o arterias que llegan a los ojos (y al resto de órganos de nuestro cuerpo) no se endurezcan y obstruyan, provocando una visión deficiente.
- También poseen importantes propiedades antiinflamatorias, por ser una fruta muy rica en ácidos grasos esenciales.
- Además, mejoran el funcionamiento del sistema digestivo. Esto lo consiguen gracias a su alto contenido en fibra y minerales, como el hierro, el potasio y el calcio.
- También, son eficaces a la hora de combatir las infecciones urinarias.
- Mejoran el sistema circulatorio, nervioso y muscular. Esto lo consiguen, sobre todo, gracias a su alto contenido en potasio.
- Además, ayudan a bajar de peso y a mantenernos en nuestro normopeso.
- Previenen las infecciones respiratorias.
- También, tienen un papel preventivo y hasta curativo en determinados problemas de la piel.
- Pueden ayudar a prevenir algunos tipos de cáncer.